Capitulos:
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1 - par{qcfs28 Lo limpio y lo impuropar} {qc 15:1-20emdash Mr 7:1-23par} Se acercaron a Jesús algunos fariseos y maestros de la ley que habían llegado de Jerusalén, y le preguntaron:
2 - emdash¿Por qué quebrantan tus discípulos la tradición de los ancianos? ¡Comen sin cumplir primero el rito de lavarse las manos!
3 - Jesús les contestó: emdash¿Y por qué ustedes quebrantan el mandamiento de Dios a causa de la tradición?
4 - Dios dijo: ldblquote Honra a tu padre y a tu madre dblquote ,{cf2super [a]} y también: ldblquote El que maldiga a su padre o a su madre será condenado a muerte. dblquote{cf2super [b]}
5 - Ustedes, en cambio, enseñan que un hijo puede decir a su padre o a su madre: ldblquote Cualquier ayuda que pudiera darte ya la he dedicado como ofrenda a Dios. dblquote
6 - En ese caso, el tal hijo no tiene que honrar a su padre.{cf2super [c]} Así por causa de la tradición anulan ustedes la palabra de Dios.
7 - ¡Hipócritas! Tenía razón Isaías cuando profetizó de ustedes:
8 - ldblquote Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí.
9 - En vano me adoran; sus enseñanzas no son más que reglas humanas. dblquote{cf2super [d]}
10 - Jesús llamó a la multitud y dijo: emdash Escuchen y entiendan.
11 - Lo que contamina a una persona no es lo que entra en la boca sino lo que sale de ella.
12 - Entonces se le acercaron los discípulos y le dijeron: emdash¿Sabes que los fariseos se escandalizaron al oír eso?
13 - emdash Toda planta que mi Padre celestial no haya plantado será arrancada de raíz emdash les respondióemdash .
14 - Déjenlos; son guías ciegos.{cf2super [e]} Y si un ciego guía a otro ciego, ambos caerán en un hoyo.
15 - emdash Explícanos la comparación emdash le pidió Pedro.
16 - emdash¿También ustedes son todavía tan torpes? emdash les dijo Jesúsemdash .
17 - ¿No se dan cuenta de que todo lo que entra en la boca va al estómago y después se echa en la letrina?
18 - Pero lo que sale de la boca viene del corazón y contamina a la persona.
19 - Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, la inmoralidad sexual, los robos, los falsos testimonios y las calumnias.
20 - Éstas son las cosas que contaminan a la persona, y no el comer sin lavarse las manos.
21 - par{qcfs28 La fe de la mujer cananeapar} {qc 15:21-28emdash Mr 7:24-30par} Partiendo de allí, Jesús se retiró a la región de Tiro y Sidón.
22 - Una mujer cananea de las inmediaciones salió a su encuentro, gritando: emdash¡Señor, Hijo de David, ten compasión de mí! Mi hija sufre terriblemente por estar endemoniada.
23 - Jesús no le respondió palabra. Así que sus discípulos se acercaron a él y le rogaron: emdash Despídela, porque viene detrás de nosotros gritando.
24 - emdash No fui enviado sino a las ovejas perdidas del pueblo de Israel emdash contestó Jesús.
25 - La mujer se acercó y, arrodillándose delante de él, le suplicó: emdash¡Señor, ayúdame!
26 - Él le respondió: emdash No está bien quitarles el pan a los hijos y echárselo a los perros.
27 - emdash Sí, Señor; pero hasta los perros comen las migajas que caen de la mesa de sus amos.
28 - emdash¡Mujer, qué grande es tu fe! emdash contestó Jesúsemdash . Que se cumpla lo que quieres. Y desde ese mismo momento quedó sana su hija.
29 - par{qcfs28 Jesús alimenta a los cuatro milpar} {qc 15:29-31emdash Mr 7:31-37par} {qc 15:32-39emdash Mr 8:1-10par} Salió Jesús de allí y llegó a orillas del mar de Galilea. Luego subió a la montaña y se sentó.
30 - Se le acercaron grandes multitudes que llevaban cojos, ciegos, lisiados, mudos y muchos enfermos más, y los pusieron a sus pies; y él los sanó.
31 - La gente se asombraba al ver a los mudos hablar, a los lisiados recobrar la salud, a los cojos andar y a los ciegos ver. Y alababan al Dios de Israel.
32 - Jesús llamó a sus discípulos y les dijo: emdash Siento compasión de esta gente porque ya llevan tres días conmigo y no tienen nada que comer. No quiero despedirlos sin comer, no sea que se desmayen por el camino.
33 - Los discípulos objetaron: emdash¿Dónde podríamos conseguir en este lugar despoblado suficiente pan para dar de comer a toda esta multitud?
34 - emdash¿Cuántos panes tienen? emdash les preguntó Jesús. emdash Siete, y unos pocos pescaditos.
35 - Luego mandó que la gente se sentara en el suelo.
36 - Tomando los siete panes y los pescados, dio gracias, los partió y se los fue dando a los discípulos. Éstos, a su vez, los distribuyeron a la gente.
37 - Todos comieron hasta quedar satisfechos. Después los discípulos recogieron siete cestas llenas de pedazos que sobraron.
38 - Los que comieron eran cuatro mil hombres, sin contar a las mujeres y a los niños.
39 - Después de despedir a la gente, subió Jesús a la barca y se fue a la región de Magadán.{cf2super [f]}