Job 30 - La Nueva Reina Valera 2000 (Adventista)

Libro de Job
Capitulos:

123456789101112131415161718192021222324252627282930313233343536373839404142

1 - Mas ahora los más mozos de días que yo, se ríen de mí; cuyos padres yo desdeñara ponerlos con los perros de mi ganado.

2 - Porque ¿para qué yo habría menester la fuerza de sus manos, en los cuales pereció el tiempo?

3 - Por causa de la pobreza y del hambre [andaban] solos; huían a la soledad, al lugar tenebroso, asolado y desierto.

4 - Que cogían malvas entre los arbustos, y raíces de enebro para calentarse.

5 - Eran echados de entre [los hombres], y [todos] les daban gritos como al ladrón.

6 - Habitaban en las barrancas de los arroyos, en las cavernas de la tierra, y en las piedras.

7 - Bramaban entre las matas, y se congregaban debajo de las espinas.

8 - Hijos de viles, y hombres sin nombre, más bajos que la misma tierra.

9 - Y ahora yo soy su canción, y soy hecho a ellos refrán.

10 - Me abominan, se alejan de mí, y aun de mi rostro no detuvieron [su] saliva.

11 - Porque [Dios] desató mi cuerda, y me afligió, [por eso] se desenfrenaron delante de mi rostro.

12 - A la mano derecha se levantaron los jóvenes; empujaron mis pies, y pisaron sobre mí las sendas de su contrición.

13 - Mi senda derribaron, se aprovecharon de mi quebrantamiento, contra los cuales no hubo ayudador.

14 - Vinieron como por portillo ancho, se revolvieron por [mi] calamidad.

15 - Se han revuelto turbaciones sobre mí; combatieron como viento mi voluntad, y mi salud como nube que pasa.

16 - Y ahora mi alma está derramada en mí; días de aflicción se apoderan de mí.

17 - De noche taladra sobre mí mis huesos, y mis pulsos no reposan.

18 - Con la grandeza de la fuerza [del dolor] mi vestidura es mudada; me ciñe como el cuello de mi ropa.

19 - Me derribó en el lodo, y soy semejante al polvo, y a la ceniza.

20 - Clamo a ti, y no me oyes; me presento, y no me atiendes.

21 - Te has vuelto cruel para mí; con la fortaleza de tu mano me eres adversario.

22 - Me levantaste, y me hiciste cabalgar sobre el viento, y derretiste en mí el ser.

23 - Porque yo conozco que me conduces a la muerte; y a la casa determinada a todo viviente.

24 - Mas él no extenderá la mano contra el sepulcro; ¿clamarán por ventura [los sepultados] cuando él los quebrantare?

25 - ¿Por ventura no lloré yo al afligido? Y mi alma ¿no se entristeció sobre el menesteroso?

26 - Cuando esperaba el bien, entonces me vino el mal; y [cuando] esperaba la luz, vino la oscuridad.

27 - Mis entrañas hierven, y no reposan; días de aflicción me han sobrecogido.

28 - Denegrido anduve, y no por el sol; me he levantado en la congregación, y clamé.

29 - He venido a ser hermano de los dragones, y compañero de los búhos.

30 - Mi piel está denegrida sobre mí, y mis huesos se secaron con ardentía.

31 - Y se ha tornado mi arpa en luto, y mi órgano en voz de lamentadores.