Habacuc 1 - Biblia de Jerusalén Segunda Edición

Libro de Habacuc
Capitulos:

123

1 - Oráculo que tuvo en visión el profeta Habacuc.

2 - ¿Hasta cuándo, Yahveh, pediré auxilio, sin que tú escuches, clamaré a ti: "¡Violencia!" sin que tú salves?

3 - ¿Por qué me haces ver la iniquidad, y tú miras la opresión? ¡Ante mí rapiña y violencia, querella hay y discordia se suscita!

4 - Por eso la ley se desvirtúa, y no aparece el juicio. ¡Sí, el impío asedia al justo, por eso aparece el juicio pervertido!

5 - Mirad a las gentes, contemplad, quedad estupefactos, atónitos: voy a hacer yo una obra en vuestros días que no creeríais si se os contara.

6 - Pues he aquí que yo suscito a los caldeos, pueblo acerbo y fogoso, que recorre las anchuras de la tierra, para apoderarse de moradas ajenas.

7 - Espantoso es y terrible; de él solo salen su juicio y su grandeza;

8 - más raudos son que leopardos sus caballos, más agudos que lobos de la tarde; sus jinetes galopan, vienen de lejos sus jinetes, vuelan como águila que se precipita a devorar.

9 - Llegan todos para hacer violencia, el ardor de sus rostros, como un viento del este, amontona cautivos como arena.

10 - Y él se burla de los reyes, los soberanos le sirven de irrisión; se ríe de toda fortaleza, levanta un terraplén y la toma.

11 - Luego se cambia el viento y pasa, y él aparece culpable por hacer de su fuerza su dios.

12 - ¿No eres tú desde antiguo, Yahveh, mi Dios, mi santo? ¡Tú no mueres! ¡Para juicio le pusiste tú, Yahveh, oh Roca, para castigar le estableciste!

13 - Muy limpio eres de ojos para mirar el mal, ver la opresión no puedes. ¿Por qué ves a los traidores y callas cuando el impío traga al que es más justo que él?

14 - Tú tratas a los hombres como a peces del mar, como a reptiles que no tienen amo.

15 - A todos los saca él con anzuelo, los atrae en su red, en su traína los recoge. Por eso se alegra y regocija,

16 - por eso sacrifica a su red, e inciensa a su traína, porque gracias a ellas es pingüe su porción, y suculenta su comida.

17 - Por eso vacía sin cesar su red para matar naciones sin piedad.