Capitulos:
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1 - Y ustedes, mujeres de Samaria, escuchen lo que tengo que decirles: Ustedes están gordas como vacas de la región de Basán, pues maltratan y humillan a los pobres, y a sus propios maridos les piden vino para emborracharse.
2 - Pero el poderoso Dios de Israel les jura que ya está cerca el dÃa en que a ustedes y a sus hijos se los llevarán lejos de aquÃ. Tanto a ellos como a ustedes les pondrán ganchos en la boca,
3 - y a ustedes las sacarán por los huecos de las murallas, una detrás de la otra, para llevarlas al matadero. Nuestro Dios les dice:
4 - «¡Ya que a ustedes les gusta tanto pecar, sigan adorando a sus Ãdolos en el santuario de Betel y en el santuario de Guilgal! No me importa lo que hagan. Yo, el Dios de Israel, les juro que asà es. »¡Sigan pecando más y más! Sigan presentando sus ofrendas todas las mañanas, y lleven cada tercer dÃa la décima parte de sus cosechas; presenten toda clase de ofrendas, y anuncien sus ofrendas voluntarias.
6 - »Cuando les hice pasar hambre, ¡en ninguna ciudad habÃa de comer! Pero a pesar de eso, ustedes no se arrepintieron. Yo, el Dios de Israel, les juro que asà fue.
7 - »Tres meses antes de la cosecha decidà no enviarles lluvia; mientras que en una ciudad llovÃa, en otra no caÃa ni gota de agua; unos campos quedaron empapados, mientras que otros quedaron resecos.
8 - Los que no tenÃan agua iban a las ciudades que sà tenÃan, aunque no lograban calmar su sed. Pero a pesar de eso, ustedes no se arrepintieron. Yo, el Dios de Israel, les juro que asà fue.
9 - »Yo destruà sus cosechas y acabé con sus árboles frutales; yo envié sobre sus campos grandes plagas de saltamontes y calientes vientos del desierto; pero a pesar de eso, ustedes no se arrepintieron. Yo, el Dios de Israel, les juro que asà fue.
10 - »Mandé plagas contra ustedes, como las que mandé contra Egipto; hice que perdieran en la guerra sus caballos y sus mejores soldados; ¡el mal olor de los muertos se sentÃa por todas partes! Pero a pesar de eso, ustedes no se arrepintieron. Yo, el Dios de Israel, les juro que asà fue.
11 - »A muchos de ustedes los destruà como destruà a las ciudades de Sodoma y de Gomorra; ¡hasta parecÃan una brasa recién sacada del fuego! Pero a pesar de eso, ustedes no se arrepintieron. Yo, el Dios de Israel, les juro que asà fue.
12 - »Por todo eso, pueblo de Israel, ahora voy a castigarlos; y como no podrán evitarlo, ¡prepárense para encontrarse conmigo!
13 - »Yo soy quien hizo el viento y las montañas; yo soy quien convierte la luz del dÃa en oscuridad; yo soy quien comunica sus planes a la humanidad entera; yo soy el que camina por las alturas de la tierra; ¡yo soy el poderoso Dios de Israel!»