Habacuc 3:11 - La Biblia de Casiodoro de Reina (1569)

Libro de Habacuc
Capitulos:

123

1 - Oración de Habacuc profeta, por las ignorancias.

2 - Oh SEÑOR, he oído tu palabra, y temí. Oh SEÑOR, aviva tu obra en medio de los tiempos, En medio de los tiempos hazla conocer; En la ira acuérdate de la misericordia.

3 - Dios vendrá de Temán, y el Santo desde el monte de Parán, (Selah.) Su gloria cubrió los cielos, y la tierra se llenó de su alabanza.

4 - Y {cf15I su} resplandor fue como la luz; cuernos le salían de su mano; y allí {cf15I estaba} escondida su fortaleza.

5 - Delante de su rostro iba mortandad, y de sus pies salían carbones encendidos.

6 - Se paró, y midió la tierra: miró, e hizo salir los gentiles; y los montes antiguos fueron desmenuzados, los collados antiguos; los caminos del mundo se humillaron a él.

7 - En nada vi las tiendas de Cusán; las tiendas de la tierra de Madián temblaron.

8 - ¿Oh SEÑOR, contra los ríos te airaste? ¿Contra los ríos fue tu enojo? ¿Tu ira {cf15I fue} contra el mismo mar, Cuando subiste sobre tus caballos, y sobre tus carros de salud?

9 - Se descubrió enteramente tu arco; {cf15I y} los juramentos a las tribus, Palabra eterna, cuando partiste la tierra con ríos.

10 - Te vieron, y tuvieron temor los montes; pasó la inundación de las aguas; el abismo dio su voz, la hondura alzó sus manos.

11 - El sol y la luna se pararon en su estancia; a la luz de tus saetas anduvieron, y al resplandor de tu fulgente lanza.

12 - Con ira hollaste la tierra, con furor trillaste los gentiles.

13 - Saliste para salvar {cf15I a} tu pueblo, para salvar con tu Ungido. Traspasaste la cabeza de la casa del impío, desnudando el cimiento hasta el cuello. Selah.

14 - Horadaste con sus báculos las cabezas de sus villas, que como tempestad acometieron para derramarme; su orgullo {cf15I era} como para devorar al pobre encubiertamente.

15 - Hiciste camino en el mar a tus caballos, por montón de grandes aguas.

16 - Oí, y tembló mi vientre; a la voz se batieron mis labios; pudrición se entró en mis huesos, y en mi asiento me estremecí; para reposar en el día de la angustia, cuando viniere al pueblo para destruirlo.

17 - Porque la higuera no florecerá, ni en las vides habrá fruto; la obra de la oliva mentirá, y los labrados no darán mantenimiento; las ovejas serán taladas de la majada, y en los corrales no habrá vacas;

18 - pero yo en el SEÑOR me alegraré, y en el Dios de mi salud me gozaré.

19 - El Señor DIOS {cf15I es} mi fortaleza, el cual pondrá mis pies como de ciervas, y sobre mis alturas me hará andar victorioso en mis instrumentos de música.