Salmos 35:24 - La Biblia de las Américas

Libro de Salmos
Capitulos:

123456789101112131415161718192021222324252627282930313233343536373839404142434445464748495051525354555657585960616263646566676869707172737475767778798081828384858687888990919293949596979899100101102103104105106107108109110111112113114115116117118119120121122123124125126127128129130131132133134135136137138139140141142143144145146147148149150

1 - {cf15I Salmo} de David. Combate, oh SEÑOR, a los que me combaten; ataca a los que me atacan.

2 - Echa mano del broquel y del escudo, y levántate en mi ayuda.

3 - Empuña también la lanza y el hacha para enfrentarte a los que me persiguen; di a mi alma: Yo soy tu salvación.

4 - Sean avergonzados y confundidos los que buscan mi vida; sean puestos en fuga y humillados los que traman el mal contra mí.

5 - Sean como paja delante del viento, con el ángel del SEÑOR acosándo{cf15I los.}

6 - Sea su camino tenebroso y resbaladizo, con el ángel del SEÑOR persiguiéndolos.

7 - Porque sin causa me tendieron su red; sin causa cavaron fosa para mi alma.

8 - Que venga destrucción sobre él sin darse cuenta, y la red que él mismo tendió lo prenda, ¡que caiga en esa misma destrucción!

9 - Y mi alma se regocijará en el SEÑOR; en su salvación se gozará.

10 - Dirán todos mis huesos: SEÑOR, ¿quién como tú, que libras al afligido de aquel que es más fuerte que él, sí, al afligido y al necesitado de aquel que lo despoja?

11 - Se levantan testigos malvados, {cf15I y} de lo que no sé me preguntan.

12 - Me devuelven mal por bien {cf15I para} aflicción de mi alma.

13 - Pero yo, cuando ellos estaban enfermos, vestía de cilicio; humillé mi alma con ayuno, y mi oración se repetía en mi pecho.

14 - Como por mi amigo, como por mi hermano, andaba de aquí para allá; como el que está de duelo por la madre, enlutado me encorvaba.

15 - Pero ellos se alegraron en mi tropiezo, y se reunieron; los agresores, a quienes no conocía, se juntaron contra mí; me despedazaban sin cesar.

16 - Como bufones impíos en una fiesta, rechinaban sus dientes contra mí.

17 - ¿Hasta cuándo, Señor, estarás mirando? Rescata mi alma de sus estragos, mi única {cf15I vida} de los leones.

18 - En la gran congregación te daré gracias; entre mucha gente te alabaré.

19 - No permitas que se regocijen a costa mía los que injustamente son mis enemigos, ni que guiñen el ojo con malicia los que sin causa me aborrecen.

20 - Porque ellos no hablan paz, sino que piensan palabras engañosas contra los pacíficos de la tierra,

21 - y abrieron bien grande su boca contra mí; dijeron: ¡Ajá, ajá, nuestros ojos lo han visto!

22 - Tú lo has visto, SEÑOR, no calles; Señor, no estés lejos de mí.

23 - Despierta y levántate para mi defensa y para mi causa, Dios mío y Señor mío.

24 - Júzgame conforme a tu justicia, oh SEÑOR, Dios mío; que no se rían de mí.

25 - Que no digan en su corazón: ¡Ajá, lo que queríamos! Que no digan: ¡Lo hemos devorado!

26 - Sean avergonzados y humillados a una los que se alegran de mi mal; cúbranse de vergüenza y deshonra los que se engrandecen contra mí.

27 - Canten de júbilo y regocíjense los que favorecen mi vindicación; y digan continuamente: Engrandecido sea el SEÑOR, que se deleita en la paz de su siervo.

28 - Y mi lengua hablará de tu justicia {cf15I y} de tu alabanza todo el día.