Hebreos 4:15 - La Biblia de las Américas

Libro de Hebreos
Capitulos:

12345678910111213

1 - Por tanto, temamos, no sea que permaneciendo aún la promesa de entrar en su reposo, alguno de vosotros parezca no haberlo alcanzado.

2 - Porque en verdad, a nosotros se nos ha anunciado la buena nueva, como también a ellos; pero la palabra que ellos oyeron no les aprovechó por no ir acompañada por la fe en los que {cf15I la} oyeron.

3 - Porque los que hemos creído entramos en ese reposo, tal como El ha dicho: COMO JURE EN MI IRA: "NO ENTRARAN EN MI REPOSO", aunque las obras de El estaban acabadas desde la fundación del mundo.

4 - Porque así ha dicho en cierto lugar acerca del séptimo {cf15I día:} Y DIOS REPOSO EN EL SEPTIMO DIA DE TODAS SUS OBRAS;

5 - y otra vez en este {cf15I pasaje:} NO ENTRARAN EN MI REPOSO.

6 - Por tanto, puesto que todavía falta que algunos entren en él, y aquellos a quienes antes se les anunció la buena nueva no entraron por causa de {cf15I su} desobediencia,

7 - {cf15I Dios} otra vez fija un día: Hoy. Diciendo por medio de David después de mucho tiempo, como se ha dicho antes: SI OIS HOY SU VOZ, NO ENDUREZCAIS VUESTROS CORAZONES.

8 - Porque si Josué les hubiera dado reposo, {cf15I Dios} no habría hablado de otro día después de ése.

9 - Queda, por tanto, un reposo sagrado para el pueblo de Dios.

10 - Pues el que ha entrado a su reposo, él mismo ha reposado de sus obras, como Dios reposó de las suyas.

11 - Por tanto, esforcémonos por entrar en ese reposo, no sea que alguno caiga {cf15I siguiendo} el mismo ejemplo de desobediencia.

12 - Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que cualquier espada de dos filos; penetra hasta la división del alma y del espíritu, de las coyunturas y los tuétanos, y {cf15I es poderosa} para discernir los pensamientos y las intenciones del corazón.

13 - Y no hay cosa creada oculta a su vista, sino que todas las cosas están al descubierto y desnudas ante los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.

14 - Teniendo, pues, un gran sumo sacerdote que trascendió los cielos, Jesús, el Hijo de Dios, retengamos nuestra fe.

15 - Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas, sino uno que ha sido tentado en todo como {cf15I nosotros} , {cf15I pero} sin pecado.

16 - Por tanto, acerquémonos con confianza al trono de la gracia para que recibamos misericordia, y hallemos gracia para la ayuda oportuna.