Esdras 9:12 - La Biblia de las Américas

Libro de Esdras
Capitulos:

12345678910

1 - Y acabadas estas cosas, se me acercaron los príncipes, diciendo: El pueblo de Israel, los sacerdotes y los levitas no se han separado de los pueblos de las tierras y sus abominaciones: de los cananeos, hititas, ferezeos, jebuseos, amonitas, moabitas, egipcios y amorreos;

2 - sino que han tomado mujeres de entre las hijas de ellos para sí y para sus hijos, y el linaje santo se ha mezclado con los pueblos de las tierras; es más, la mano de los príncipes y de los gobernantes ha sido la primera en {cf15I cometer} esta infidelidad.

3 - Y cuando oí de este asunto, rasgué mi vestido y mi manto, y arranqué pelo de mi cabeza y de mi barba, y me senté atónito.

4 - Entonces se reunieron conmigo todos los que temblaban ante las palabras del Dios de Israel por causa de la infidelidad de los desterrados, y estuve sentado atónito hasta la ofrenda de la tarde.

5 - Pero a {cf15I la hora de} la ofrenda de la tarde, me levanté de mi humillación con mi vestido y mi manto rasgados, y caí de rodillas y extendí mis manos al SEÑOR mi Dios;

6 - y dije: Dios mío, estoy avergonzado y confuso para {cf15I poder} levantar mi rostro a ti, mi Dios, porque nuestras iniquidades se han multiplicado por encima de {cf15I nuestras} cabezas, y nuestra culpa ha crecido hasta los cielos.

7 - Desde los días de nuestros padres hasta el día de hoy {cf15I hemos estado} bajo gran culpa, y a causa de nuestras iniquidades, nosotros, nuestros reyes {cf15I y} nuestros sacerdotes hemos sido entregados en mano de los reyes de estas tierras, a la espada, al cautiverio, al saqueo y a la vergüenza pública, como en este día.

8 - Pero ahora, por un breve momento, ha habido misericordia de parte del SEÑOR nuestro Dios, para dejarnos un remanente {cf15I que ha} escapado y darnos un refugio en su lugar santo, para que nuestro Dios ilumine nuestros ojos y nos conceda un poco de vida en nuestra servidumbre.

9 - Porque siervos somos; mas en nuestra servidumbre, nuestro Dios no nos ha abandonado, sino que ha extendido {cf15I su} misericordia sobre nosotros ante los ojos de los reyes de Persia, dándonos ánimo para levantar la casa de nuestro Dios y para restaurar sus ruinas, y dándonos una muralla en Judá y en Jerusalén.

10 - Y ahora, Dios nuestro, ¿qué diremos después de esto? Porque hemos abandonado tus mandamientos,

11 - que por medio de tus siervos los profetas ordenaste, diciendo: "La tierra a la cual entráis para poseerla es una tierra inmunda con la inmundicia de los pueblos de estas tierras, con sus abominaciones que la han llenado de un extremo a otro, {cf15I y} con su impureza.

12 - "Ahora pues, no deis vuestras hijas a sus hijos ni toméis sus hijas para vuestros hijos, y nunca procuréis su paz ni su prosperidad, para que seáis fuertes y comáis lo mejor de la tierra y {cf15I la} dejéis por heredad a vuestros hijos para siempre."

13 - Y después de todo lo que nos ha sobrevenido a causa de nuestras malas obras y nuestra gran culpa, puesto que tú, nuestro Dios, {cf15I nos} has pagado menos de {cf15I lo que} nuestras iniquidades {cf15I merecen,} y nos has dado un {cf15I remanente} que ha escapado como éste,

14 - ¿hemos de quebrantar de nuevo tus mandamientos emparentándo{cf15I nos} con los pueblos que cometen estas abominaciones? ¿No te enojarías con nosotros hasta destruir{cf15I nos} , sin que quedara remanente ni quien escapara?

15 - Oh SEÑOR, Dios de Israel, tú eres justo, porque hemos quedado un {cf15I remanente} que ha escapado, como {cf15I en} este día; he aquí, estamos delante de ti en nuestra culpa, porque nadie puede estar delante de ti a causa de esto.