Proverbios 23:2 - Biblia de Jerusalén Segunda Edición

Libro de Proverbios
Capitulos:

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1 - Si te sientas a comer con poderoso, mira bien al que está frente a ti;

2 - pon un cuchillo a tu garganta si eres hombre de apetito;

3 - no desees sus manjares, porque es alimento engañoso.

4 - No te fatigues por enriquecerte, deja de pensar en ello.

5 - Pones tus ojos en ello y no hay nada. Porque se hace alas como águila, y se vuela hasta el cielo.

6 - No comas pan con hombre de malas intenciones, ni desees sus manjares.

7 - Porque, según lo que calcula en su interior, te dice: "¡Come y bebe!", pero su corazón no está contigo.

8 - Nada más comer lo vomitarías y tus palabras amables serían tu ruina.

9 - A oídos de necio no hables, porque se burlará de la prudencia de tus dichos.

10 - No desplaces el lindero antiguo, no entres en el campo de los huérfanos,

11 - porque su vengador es poderoso, y defendería su pleito contra ti.

12 - Aplica tu corazón a la instrucción, y tus oídos a las palabras de la ciencia.

13 - No ahorres corrección al niño, que no se va a morir porque le castigues con la vara.

14 - Con la vara le castigarás y librarás su alma del šeol.

15 - Hijo mío, si tu corazón es sabio, se alegrará también mi corazón,

16 - y exultarán mis riñones al decir tus labios cosas rectas.

17 - No envidie tu corazón a los pecadores, más bien en el temor de Yahveh permanezca todo el día,

18 - porque hay un mañana, y tu esperanza no será aniquilada.

19 - Escucha, hijo, y serás sabio, y endereza tu corazón por el camino...

20 - No seas de los que se emborrachan de vino, ni de los que se ahítan de carne,

21 - porque borracho y glotón se empobrecen y el sopor se viste de harapos.

22 - Escucha a tu padre, que él te engendró, y no desprecies a tu madre por ser vieja.

23 - Adquiere la verdad y no la vendas: la sabiduría, la instrucción, la inteligencia.

24 - El padre del justo rebosa de gozo, quien engendra un sabio por él se regocija.

25 - Se alegrarán tu padre y tu madre, y gozará la que te ha engendrado.

26 - Dame, hijo mío, tu corazón, y que tus ojos hallen deleite en mis caminos.

27 - Fosa profunda es la prostituta, pozo angosto la mujer extraña.

28 - También ella como ladrón pone emboscadas, y multiplica entre los hombres los traidores.

29 - ¿Para quién las "Desgracias"? ¿para quién los "Ayes"? ¿para quién los litigios? ¿para quién los lloros? ¿para quién los golpes sin motivo? ¿para quién los ojos turbios?

30 - Para los que se eternizan con el vino, los que van en busca de vinos mezclados.

31 - No mires el vino: ¡Qué buen color tiene! ¡cómo brinca en la copa! ¡qué bien entra!

32 - Pero, a la postre, como serpiente muerde, como víbora pica.

33 - Tus ojos verán cosas extrañas, y tu corazón hablará sin ton ni son.

34 - Estarás como acostado en el corazón del mar, o acostado en la punta de un mástil.

35 - "Me han golpeado, pero no estoy enfermo; me han tundido a palos, pero no lo he sentido, ¿Cuándo me despertaré...?, me lo seguiré preguntando."