Marcos 7:29 - Biblia de Jerusalén Primera Edición (1976)

Libro de Marcos
Capitulos:

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1 - Se reúnen junto a él los fariseos, así como algunos escribas venidos de Jerusalén.

2 - Y al ver que algunos de sus discípulos comían con manos impuras, es decir no lavadas,

3 - - es que los fariseos y todos los judíos no comen sin haberse lavado las manos hasta el codo, aferrados a la tradición de los antiguos,

4 - y al volver de la plaza, si no se bañan, no comen; y hay otras muchas cosas que observan por tradición, como la purificación de copas, jarros y bandejas -.

5 - Por ello, los fariseos y los escribas le preguntan: «¿Por qué tus discípulos no viven conforme a la tradición de los antepasados, sino que comen con manos impuras?»

6 - El les dijo: «Bien profetizó Isaías de vosotros, hipócritas, según está escrito: = Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí. =

7 - = En vano me rinden culto, ya que enseñan doctrinas que son preceptos de hombres. =

8 - Dejando el precepto de Dios, os aferráis a la tradición de los hombres.»

9 - Les decía también: «¡Qué bien violáis el mandamiento de Dios, para conservar vuestra tradición!

10 - Porque Moisés dijo: = Honra a tu padre y a tu madre = y: = el que maldiga a su padre o a su madre, sea castigado con la muerte. = Pero vosotros decís:

11 - Si uno dice a su padre o a su madre: “Lo que de mí podrías recibir como ayuda lo declaro Korbán - es decir: ofrenda -“,

12 - ya no le dejáis hacer nada por su padre y por su madre,

13 - anulando así la Palabra de Dios por vuestra tradición que os habéis transmitido; y hacéis muchas cosas semejantes a éstas.»

14 - Llamó otra vez a la gente y les dijo: «Oídme todos y entended.

15 - Nada hay fuera del hombre que, entrando en él, pueda contaminarle; sino lo que sale del hombre, eso es lo que contamina al hombre.

16 - Quien tenga oídos para oír, que oiga.»

17 - Y cuando, apartándose de la gente, entró en casa, sus discípulos le preguntaban sobre la parábola.

18 - El les dijo: «¿Conque también vosotros estáis sin inteligencia? ¿No comprendéis que todo lo que de fuera entra en el hombre no puede contaminarle,

19 - pues no entra en su corazón, sino en el vientre y va a parar al excusado?» - así declaraba puros todos los alimentos -.

20 - Y decía: «Lo que sale del hombre, eso es lo que contamina al hombre.

21 - Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen las intenciones malas: fornicaciones, robos, asesinatos,

22 - adulterios, avaricias, maldades, fraude, libertinaje, envidia, injuria, insolencia, insensatez.

23 - Todas estas perversidades salen de dentro y contaminan al hombre.»

24 - Y partiendo de allí, se fue a la región de Tiro, y entrando en una casa quería que nadie lo supiese, pero no logró pasar inadvertido,

25 - sino que, en seguida, habiendo oído hablar de él una mujer, cuya hija estaba poseída de un espíritu inmundo, vino y se postró a sus pies.

26 - Esta mujer era pagana, sirofenicia de nacimiento, y le rogaba que expulsara de su hija al demonio.

27 - El le decía: «Espera que primero se sacien los hijos, pues no está bien tomar el pan de los hijos y echárselo a los perritos.»

28 - Pero ella le respondió: «Sí, Señor; que también los perritos comen bajo la mesa migajas de los niños.»

29 - El, entonces, le dijo: «Por lo que has dicho, vete; el demonio ha salido de tu hija.»

30 - Volvió a su casa y encontró que la niña estaba echada en la cama y que el demonio se había ido.

31 - Se marchó de la región de Tiro y vino de nuevo, por Sidón, al mar de Galilea, atravesando la Decápolis.

32 - Le presentan un sordo que, además, hablaba con dificultad, y le ruegan imponga la mano sobre él.

33 - El, apartándole de la gente, a solas, le metió sus dedos en los oídos y con su saliva le tocó la lengua.

34 - Y, levantando los ojos al cielo, dio un gemido, y le dijo: = «Effatá», que quiere decir: «¡Abrete!»

35 - Se abrieron sus oídos y, al instante, se soltó la atadura de su lengua y hablaba correctamente.

36 - Jesús les mandó que a nadie se lo contaran. Pero cuanto más se lo prohibía, tanto más ellos lo publicaban.

37 - Y se maravillaban sobremanera y decían «Todo lo ha hecho bien; hace oír a los sordos y hablar a los mudos.»