Colosenses 4:9 - Biblia de Jerusalén Primera Edición (1976)

Libro de Colosenses
Capitulos:

1234

1 - Amos, dad a vuestros esclavos lo que es justo y equitativo, teniendo presente que también vosotros tenéis un Amo en el cielo.

2 - Sed perseverantes en la oración, velando en ella con acción de gracias;

3 - orad al mismo tiempo también por nosotros para que Dios nos abra una puerta a la Palabra, y podamos anunciar el Misterio de Cristo, por cuya causa estoy yo encarcelado,

4 - para darlo a conocer anunciándolo como debo hacerlo.

5 - Portaos prudentemente con los de fuera, aprovechando bien el tiempo presente.

6 - Que vuestra conversación sea siempre amena, sazonada con sal, sabiendo responder a cada cual como conviene.

7 - En cuanto a mí, de todo os informará Tíquico, el hermano querido, fiel ministro y consiervo en el Señor,

8 - a quien os envío expresamente para que sepáis de nosotros y consuele vuestros corazones.

9 - Y con él a Onésimo, el hermano fiel y querido compatriota vuestro. Ellos os informarán de todo cuanto aquí sucede.

10 - Os saludan Aristarco, mi compañero de cautiverio, y Marcos, primo de Bernabé, acerca del cual recibisteis ya instrucciones. Si va a vosotros, dadle buena acogida.

11 - Os saluda también Jesús, llamado Justo; son los únicos de la circuncisión que colaboran conmigo por el Reino de Dios y que han sido para mí un consuelo.

12 - Os saluda Epafras, vuestro compatriota, siervo de Cristo Jesús, que se esfuerza siempre a favor vuestro en sus oraciones, para que os mantengáis perfectos cumplidores de toda voluntad divina.

13 - Yo soy testigo de lo mucho que se afana por vosotros, por los de Laodicea y por los de Hierápolis.

14 - Os saluda Lucas, el médico querido, y Demás.

15 - Saludad a los hermanos de Laodicea, a Ninfas y la Iglesia de su casa.

16 - Una vez que hayáis leído esta carta entre vosotros, procurad que sea también leída en la Iglesia de Laodicea. Y por vuestra parte leed vosotros la que os venga de Laodicea.

17 - Decid a Arquipo: «Considera el ministerio que recibiste en el Señor, para que lo cumplas».

18 - El saludo va de mi mano, Pablo. Acordaos de mis cadenas. La gracia sea con vosotros.