Ester 5:2 - Biblia Dios Habla Hoy Latinoamericana (1996)

Libro de Ester
Capitulos:

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1 - Tres días después, Ester se puso las vestiduras reales y entró en el patio interior de palacio, deteniéndose ante la sala en que el rey estaba sentado en su trono, el cual quedaba frente ala puerta.

2 - En cuanto el rey vio a la reina Ester en el patio, se mostró cariñoso con ella y extendió hacia ella el cetro de oro que llevaba en la mano. Ester se acercó y tocó el extremo del cetro,

3 - y el rey le preguntó: –¿Qué te pasa, reina Ester? ¿Qué deseas? ¡Aun si me pides la mitad de mi reino, te la concederé! y Ester respondió:

4 - –Si le parece bien a Su Majestad, le ruego que asista hoy al banquete que he preparado en su honor, y que traiga también a Amán. Entonces el rey ordenó:

5 - –Busquen en seguida a Amán, y que se cumpla el deseo de la reina Ester. Así el rey yamán fueron al banquete que la reina había preparado.

6 - Durante el banquete, el rey dijo a Ester: –¡Pídeme lo que quieras, y te lo concederé, aun si me pides la mitad de mi reino!

7 - y Ester contestó: –Solo deseo y pido esto:

8 - que si Su Majestad me tiene cariño y accede a satisfacer mi deseo y a concederme lo que pido, asista mañana, acompañado de Amán, a otro banquete que he preparado en su honor. Entonces haré lo que Su Majestad me pide.

9 - Amán salió del banquete muy contento y satisfecho; pero se llenó de ira al ver que Mardoqueo, que estaba a la puerta del palacio, no se levantaba y ni siquiera se movía al verlo pasar.

10 - Sin embargo, en ese momento no demostró el odio que sentía; pero cuando llegó a su casa mandó llamar a sus amigos y a Zeres, su mujer,

11 - y habló con ellos de sus grandes riquezas, de los muchos hijos que tenía, y de cómo el rey lo había distinguido entre sus funcionarios y colaboradores, dándole un puesto superior al de todos ellos.

12 - y añadió: –Además, yo soy el único a quien la reina Ester ha invitado al banquete que hoy ofreció al rey; y me ha invitado de nuevo al banquete que le ofrecerá mañana.

13 - Sin embargo, mientras yo vea a ese judío Mardoqueo sentado ala puerta del palacio real, todo esto no significará nada para mí.

14 - Entonces su mujer y todos sus amigos le dijeron: –Manda construir una horca, de unos veintidós metros de altura, y mañana por la mañana pídele al rey que cuelguen en ella a Mardoqueo. Así podrás ir al banquete con el rey sin ninguna preocupación. Esta idea le agradó a Amán, y mandó preparar la horca.