Jeremias 44 - Dios Habla Hoy en Castellano Peninsular (2002)

Libro de Jeremias
Capitulos:

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1 - par {i Mensaje a los judíos en Egipto{cf2super [a]}}par Mensaje que Jeremías recibió para todos los judíos que vivían en Egipto, en las ciudades de Migdol,{cf2super [b]} Tafnes, Menfis{cf2super [c]} y la región del sur:

2 - {f0 u8220?}El Señor todopoderoso, el Dios de Israel, dice: {f0 u8216?}Vosotros habéis visto todas las calamidades que hice caer sobre Jerusalén y las demás ciudades de Judá. Ahora están en ruinas, y nadie vive en ellas

3 - a causa de las maldades que cometieron, pues me ofendieron adorando a otros dioses{cf2super [d]} y ofreciéndoles incienso; dioses con los que ni ellos ni vosotros ni vuestros antepasados teníais nada que ver.

4 - Una y otra vez envié a mis siervos los profetas para que os dijeran que no hicierais esas cosas repugnantes que yo detesto.

5 - Pero no me obedecisteis ni me hicisteis caso. En vez de dejar vuestra maldad, seguisteis ofreciendo incienso a otros dioses.

6 - Entonces se encendieron mi ira y mi furor, y ardieron como un fuego en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén. Quedaron en ruinas y desiertas hasta el día de hoy.

7 - {f0 u8216?}Así pues, yo, el Señor todopoderoso, el Dios de Israel, digo: ¿Por qué traéis sobre vosotros mismos ese mal tan grande? ¿Por qué hacéis que muera toda la gente de Judá, hombres, mujeres y niños, y hasta recién nacidos, de manera que no quede nadie?

8 - ¿Por qué me ofendéis con vuestras acciones y ofrecéis incienso a otros dioses aquí en Egipto, donde habéis venido a vivir? Con ello vais a provocar vuestra propia destrucción, y os convertiréis en ejemplo de maldición y humillación entre todas las naciones de la tierra.

9 - ¿Ya os habéis olvidado de todas las maldades que cometieron vuestros antepasados, y de las que cometieron los reyes de Judá y sus esposas, y de las que vosotros mismos y vuestras esposas cometisteis en el territorio de Judá y en las calles de Jerusalén?

10 - Hasta ahora no habéis cambiado de conducta, ni habéis sentido temor, ni habéis cumplido las instrucciones y leyes que os di a vosotros y a vuestros antepasados.

11 - {f0 u8216?}Por eso yo, el Señor todopoderoso, el Dios de Israel, os digo: He decidido traer mal sobre vosotros y destruir a todo Judá.

12 - Haré que los que quedaron de Judá y se empeñaron en irse a vivir a Egipto, sean destruidos allá por completo. Todos, desde el más chico hasta el más grande, morirán por la guerra o el hambre, y se convertirán en ejemplo de maldición y humillación, en algo que causará terror.

13 - Castigaré a los que vivan en Egipto como castigué a Jerusalén, con la guerra, el hambre y la peste.

14 - Nadie de ese pequeño resto de Judá que se ha ido a vivir a Egipto podrá escapar o quedar con vida. Y aunque quieran volver a Judá para establecerse allí, no volverán, a no ser unos cuantos refugiados.{f0 u8217?} {f0 u8221?

15 - Entonces, aquellos que sabían que sus esposas ofrecían incienso a otros dioses, junto con las demás mujeres que se encontraban allí (todos los cuales formaban un grupo numeroso), más los judíos que vivían en la región sur de Egipto,{cf2super [e]} respondieron a Jeremías:

16 - {f0 u8211?}No haremos caso de ese mensaje que nos has traído de parte del Señor.

17 - Al contrario, seguiremos haciendo lo que habíamos decidido hacer. Seguiremos ofreciendo incienso y ofrendas de vino a la diosa Reina del Cielo,{cf2super [f]} como lo hemos hecho hasta ahora y como antes lo hicieron nuestros antepasados y nuestros reyes y jefes en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén. Pues antes teníamos comida en abundancia, nos iba bien y no nos vino ninguna desgracia;

18 - pero desde que dejamos de ofrecer incienso y ofrendas de vino a la Reina del Cielo, nos falta de todo, y nuestra gente muere de hambre o en la guerra.

19 - Las mujeres añadieron:par {f0 u8211?}Nosotras hacíamos tortas que representaban a la Reina del Cielo, y le ofrecíamos incienso y ofrendas de vino, pero todo ello con el consentimiento de nuestros esposos. Y lo seguiremos haciendo.

20 - Entonces Jeremías respondió a todos los hombres y mujeres que le habían contestado de esa manera:

21 - {f0 u8211?}¿Creéis que el Señor no se daba cuenta, o que se había olvidado de que vosotros y vuestros antepasados, vuestros reyes, vuestros jefes y el pueblo en general, ofrecíais incienso a otros dioses en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén?

22 - Pero el Señor no pudo soportar más las malas acciones cometidas por vosotros y que a él tanto le disgustan. Por eso, vuestro país está hoy en ruinas y no hay nadie que viva en él; se ha convertido en ejemplo de maldición, en algo que causa terror.

23 - Esta desgracia en que ahora os encontráis os ha venido precisamente porque ofrecisteis incienso a otros dioses, pecando así contra el Señor, y porque no obedecisteis sus instrucciones y leyes, ni cumplisteis sus mandatos.

24 - Jeremías dijo además a todo el pueblo, y especialmente a las mujeres:par {f0 u8211?}Escuchad este mensaje del Señor todos vosotros, gente de Judá que vive en Egipto.

25 - El Señor todopoderoso, el Dios de Israel, dice: ''Vosotras las mujeres{cf2super [g]} lo decís de boca y lo practicáis de hecho. Decís que habéis prometido ofrecer incienso y ofrendas de vino a la Reina del Cielo, y que cumpliréis sin falta vuestra promesa. ¡Muy bien, cumplid y poned por obra lo que habéis prometido!

26 - Pero oíd todos vosotros, gente de Judá que vive en Egipto, lo que yo, el Señor, os digo: Juro por mi nombre soberano que ninguno de los de Judá volverá a pronunciar mi nombre en todo Egipto, diciendo: Por la vida del Señor.

27 - Porque yo estaré vigilando para enviarles calamidades y no beneficios. Todos los de Judá que viven en Egipto serán completamente aniquilados por la guerra o el hambre.

28 - Serán muy contados los que escapen de morir en la guerra y vuelvan de Egipto a Judá. Así, todos los que quedaban en Judá y vinieron a vivir a Egipto verán qué palabras se cumplieron, si las mías o las de ellos.

29 - Yo, el Señor, os daré esta señal como prueba de que mis amenazas se van a cumplir y de que os castigaré en este país:

30 - Yo entregaré al faraón Hofra, rey de Egipto, en poder de sus enemigos mortales, así como entregué a Sedequías, rey de Judá, en poder de Nabucodonosor, rey de Babilonia,{cf2super [h]} su enemigo mortal.'