Filipenses 4:18 - La Biblia Textual

Libro de Filipenses
Capitulos:

1234

1 - Así que, hermanos míos amados y ardientemente deseados, gozo y corona mía, manteneos así firmes en el Señor, amados míos.

2 - Exhorto a Evodia y exhorto a Síntique a que tengan el mismo sentir en el Señor.

3 - Ciertamente te ruego también a ti, genuino colaborador, que las ayudes, ya que ellas lucharon juntamente conmigo en el Evangelio, también con Clemente y con los demás colaboradores míos, cuyos nombres están en el libro de la vida.

4 - ¡Regocijaos en el Señor siempre! Otra vez lo diré: ¡Regocijaos!

5 - Vuestra gentileza sea conocida de todos los hombres. ¡El Señor está cerca!

6 - Por nada estéis angustiados, antes bien, por la oración y la súplica, en todo sean conocidas ante Dios vuestras peticiones con acción de gracias,

7 - y la paz de Dios, que sobrepuja a todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.

8 - Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honorable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buena reputación; si hay alguna virtud, si hay algo digno de alabanza, en eso pensad.

9 - Lo que aprendisteis y recibisteis y oísteis y visteis en mí, esto haced, y el Dios de paz estará con vosotros.

10 - En gran manera me regocijé en el Señor de que ya al fin revivió el interés que sentís por mí, el cual ya sentíais, pero os faltaba la oportunidad.

11 - No lo digo movido por la necesidad, porque he aprendido a estar satisfecho con lo que tengo.

12 - Sé vivir con estrechez y sé también tener abundancia. Para estar saciado como para pasar hambre, para tener abundancia como para padecer necesidad, en todo y por todo he aprendido el secreto:

13 - ¡Todo lo puedo en el que me fortalece!

14 - Aún así, bien hicisteis en participar conmigo en mi aflicción.

15 - Y también sabéis vosotros, oh filipenses, que al comienzo del Evangelio, cuando salí de Macedonia, ninguna iglesia compartió conmigo en cuanto al dar y al recibir, sino solamente vosotros;

16 - porque aun a Tesalónica me enviasteis una y otra vez para mis necesidades.

17 - No es que busque dádivas, sino que busco que en vuestra cuenta abunde fruto.

18 - Así, lo he recibido todo y tengo abundancia; estoy lleno, habiendo recibido de Epafrodito lo que me enviasteis, olor fragante, sacrificio aceptable, agradable a Dios.

19 - Mi Dios, pues, suplirá toda vuestra necesidad según su riqueza en gloria en Cristo Jesús.

20 - Y al Dios y Padre nuestro sea la gloria, por los siglos de los siglos, amén.

21 - Saludad a todo santo en Cristo Jesús. Os saludan los hermanos que están conmigo.

22 - Os saludan todos los santos, y mayormente los que son de la casa de César.

23 - La gracia del Señor Jesucristo sea con vuestro espíritu.