Salmos 71:17 - Biblia en Lenguaje Sencillo

Libro de Salmos
Capitulos:

123456789101112131415161718192021222324252627282930313233343536373839404142434445464748495051525354555657585960616263646566676869707172737475767778798081828384858687888990919293949596979899100101102103104105106107108109110111112113114115116117118119120121122123124125126127128129130131132133134135136137138139140141142143144145146147148149150

1 - Dios mío, en ti he puesto mi confianza; no me pongas jamás en vergüenza.

2 - Tú eres un Dios justo; ¡rescátame y ponme a salvo! ¡Préstame atención y ayúdame!

3 - ¡Protégeme como una roca donde siempre pueda refugiarme! Da la orden, y quedaré a salvo, pues tú eres esa roca; ¡tú eres mi fortaleza!

4 - Dios mío, tú eres mi esperanza; no permitas que yo caiga en poder de gente malvada y violenta. Desde que era joven puse mi confianza en ti;

6 - desde antes de nacer ya dependía de ti. ¡Fuiste tú quien me hizo nacer! ¡Por eso te alabaré siempre!

7 - Muchos se asombran al verme, pero tú eres para mí un refugio seguro.

8 - A todas horas te alabo; todo el día anuncio tu grandeza.

9 - No me desprecies cuando llegue yo a viejo; no me abandones cuando ya no tenga fuerzas.

10 - Mis enemigos hablan mal de mí; me vigilan y piensan hacerme daño.

11 - Hasta ordenan a su gente que me persigan y me atrapen. Creen que me abandonaste, y que nadie podrá salvarme.

12 - Dios mío, ¡no me dejes solo! ¡Ven pronto en mi ayuda!

13 - Pon en vergüenza a los que me acusan; ¡pon en completo ridículo a los que buscan mi mal, y acaba con ellos!

14 - Yo, por mi parte, siempre confiaré en ti y te alabaré más todavía.

15 - Aunque no alcanzo a entenderlo, a todas horas diré que eres un Dios que salva con grandes actos de justicia.

16 - Dios mío, ahora voy a recordar tus hechos poderosos, y hablaré de la justicia que sólo tú puedes hacer.

17 - Desde que yo era joven tú has sido mi maestro, y hasta ahora sigo hablando de las maravillas que has hecho.

18 - 19 Dios mío, aunque estoy lleno de canas, no me abandones; todavía quiero decirles a los que aún no han nacido que tú eres un Dios poderoso. Eres incomparable, pues has hecho grandes cosas; tu justicia llega hasta el cielo.

20 - Tú me hiciste pasar por muchos aprietos y problemas, pero volverás a darme vida: ¡de lo profundo de la tumba volverás a levantarme!

21 - Me darás mayor poder, y volverás a consolarme.

22 - Santo Dios de Israel, tú eres un Dios fiel. Por eso te cantaré himnos con música de arpas y de otros instrumentos de cuerda.

23 - Te cantaré himnos y gritaré de alegría porque me salvaste la vida.

24 - Todo el día hablaré de tu poder para salvar, pues los que buscaban hacerme daño quedaron avergonzados por completo.