Mateo 8 - La Biblia Reina Valera Revisión 1995

Libro de Mateo
Capitulos:

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1 - {cf5super [1]} Cuando descendió Jesús del monte, lo seguía mucha gente.

2 - En esto se le acercó un leproso{cf5super [2]} y se postró ante él, diciendo: par --Señor, si quieres, puedes limpiarme.

3 - Jesús extendió la mano y lo tocó, diciendo: par --Quiero, sé limpio. par Y al instante su lepra desapareció.

4 - Entonces Jesús le dijo: par --Mira, no lo digas a nadie,{cf5super [3]} sino ve, muéstrate al sacerdote y presenta la ofrenda que ordenó Moisés,{cf5super [4]} para testimonio a ellos.

5 - {cf5super [5]} Al entrar Jesús en Capernaúm, se le acercó un centurión,{cf5super [6]} que le rogaba

6 - diciendo: par --Señor, mi criado está postrado en casa, paralítico, gravemente atormentado.

7 - Jesús le dijo: par --Yo iré y lo sanaré.{cf5super [7]}

8 - Respondió el centurión y dijo: par --Señor, no soy digno de que entres bajo mi techo; solamente di la palabra y mi criado sanará,

9 - pues también yo soy hombre bajo autoridad y tengo soldados bajo mis órdenes, y digo a este: "Ve", y va; y al otro: "Ven", y viene; y a mi siervo: "Haz esto", y lo hace.

10 - Al oírlo Jesús, se maravilló y dijo a los que lo seguían: par --De cierto os digo que ni aun en Israel he hallado tanta fe.

11 - Os digo que vendrán muchos del oriente y del occidente,{cf5super [8]} y se sentarán con Abraham, Isaac y Jacob en el reino de los cielos;{cf5super [9]}

12 - pero los hijos del reino serán echados a las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.{cf5super [10]}

13 - Entonces Jesús dijo al centurión: par --Vete, y como creíste te sea hecho. par Y su criado quedó sano en aquella misma hora.

14 - Fue Jesús a casa de Pedro y vio a la suegra de este postrada en cama, con fiebre.

15 - Entonces tocó su mano y la fiebre la dejó; ella se levantó, y los servía.

16 - Al caer la noche le llevaron muchos endemoniados, y con la palabra echó fuera a los demonios y sanó a todos los enfermos,

17 - para que se cumpliera lo dicho por el profeta Isaías: "Él mismo tomó nuestras enfermedades y llevó nuestras dolencias".{cf5super [11]}

18 - Viéndose Jesús rodeado de mucha gente, dio orden de pasar al otro lado.{cf5super [12]}

19 - Se le acercó un escriba y le dijo: par --Maestro, te seguiré adondequiera que vayas.

20 - Jesús le dijo: par --Las zorras{cf5super [13]} tienen guaridas, y las aves del cielo, nidos; pero el Hijo del hombre{cf5super [14]} no tiene donde recostar su cabeza.

21 - Otro de sus discípulos le dijo: par --Señor, permíteme que vaya primero y entierre a mi padre.{cf5super [15]}

22 - Jesús le dijo: par --Sígueme; deja que los muertos entierren a sus muertos.{cf5super [16]}

23 - Entró él en la barca y sus discípulos lo siguieron.

24 - Y se levantó en el mar una tempestad tan grande que las olas cubrían la barca; pero él dormía.

25 - Se acercaron sus discípulos y lo despertaron, diciendo: par --¡Señor, sálvanos, que perecemos!

26 - Él les dijo: par --¿Por qué teméis, hombres de poca fe? par Entonces, levantándose, reprendió a los vientos y al mar, y sobrevino una gran calma.

27 - Los hombres, maravillados, decían: par --¿Qué hombre es este, que aun los vientos y el mar lo obedecen?{cf5super [17]}

28 - Cuando llegó a la otra orilla,{cf5super [18]} a la tierra de los gadarenos,{cf5super [19]} vinieron a su encuentro dos endemoniados{cf5super [20]} que salían de los sepulcros,{cf5super [21]} feroces en gran manera, tanto que nadie podía pasar por aquel camino.

29 - Y clamaron diciendo: par --¿Qué tienes con nosotros, Jesús, Hijo de Dios? ¿Has venido acá para atormentarnos antes de tiempo?{cf5super [22]}

30 - Estaba paciendo lejos de ellos un hato de muchos cerdos.{cf5super [23]}

31 - Y los demonios le rogaron diciendo: par --Si nos echas fuera, permítenos ir a aquel hato de cerdos.

32 - Él les dijo: par --Id. par Ellos salieron y se fueron a aquel hato de cerdos, y entonces todo el hato de cerdos se lanzó al mar por un despeñadero, y perecieron en las aguas.

33 - Los que los apacentaban huyeron y, llegando a la ciudad, contaron todas las cosas y lo que había pasado con los endemoniados.

34 - Entonces toda la ciudad salió al encuentro de Jesús y, cuando lo vieron, le rogaron que se fuera de su territorio.