Mateo 20:11 - La Biblia Reina Valera Revisión 1995

Libro de Mateo
Capitulos:

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1 - {cf5super [1]} "El reino de los cielos es semejante a un hombre, padre de familia, que salió por la mañana a contratar obreros para su viña.

2 - Y habiendo convenido con los obreros en un denario{cf5super [2]} al día, los envió a su viña.

3 - Saliendo cerca de la hora tercera{cf5super [3]} del día, vio a otros que estaban en la plaza desocupados

4 - y les dijo: "Id también vosotros a mi viña, y os daré lo que sea justo". Y ellos fueron.

5 - Salió otra vez cerca de las horas sexta y novena,{cf5super [4]} e hizo lo mismo.

6 - Y saliendo cerca de la hora undécima,{cf5super [5]} halló a otros que estaban desocupados y les dijo: "¿Por qué estáis aquí todo el día desocupados?"

7 - Le dijeron: "Porque nadie nos ha contratado". Él les dijo: "Id también vosotros a la viña, y recibiréis lo que sea justo".

8 - "Cuando llegó la noche, el señor de la viña dijo a su mayordomo: "Llama a los obreros y págales el jornal,{cf5super [6]} comenzando desde los últimos hasta los primeros".

9 - Llegaron los que habían ido cerca de la hora undécima y recibieron cada uno un denario.

10 - Al llegar también los primeros, pensaron que habían de recibir más, pero también ellos recibieron cada uno un denario.

11 - Y al recibirlo, murmuraban contra el padre de familia,

12 - diciendo: "Estos últimos han trabajado una sola hora y los has tratado igual que a nosotros, que hemos soportado la carga y el calor del día".

13 - Él, respondiendo, dijo a uno de ellos: "Amigo, no te hago ninguna injusticia. ¿No conviniste conmigo en un denario?

14 - Toma lo que es tuyo y vete; pero quiero dar a este último lo mismo que a ti.

15 - ¿No me está permitido hacer lo que quiero con lo mío? ¿O tienes tú envidia,{cf5super [7]} porque yo soy bueno?"

16 - Así, los primeros serán últimos y los últimos, primeros, porque muchos son llamados, pero pocos escogidos.{cf5super [8]}

17 - Mientras subía Jesús a Jerusalén, tomó a sus doce discípulos aparte y les dijo por el camino:

18 - "Ahora subimos a Jerusalén, y el Hijo del hombre será entregado a los principales sacerdotes y a los escribas. Lo condenarán a muerte

19 - y lo entregarán a los gentiles{cf5super [9]} para que se burlen de él, lo azoten y lo crucifiquen; pero al tercer día resucitará".{cf5super [10]}

20 - Entonces se le acercó la madre de los hijos de Zebedeo con sus hijos,{cf5super [11]} postrándose ante él y pidiéndole algo.

21 - Él le dijo: par --¿Qué quieres? par Ella le dijo: par --Ordena que en tu Reino estos dos hijos míos se sienten el uno a tu derecha y el otro a tu izquierda.{cf5super [12]}

22 - Entonces Jesús, respondiendo, dijo: par --No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber del vaso que yo he de beber,{cf5super [13]} y ser bautizados con el bautismo con que yo soy bautizado? par Ellos le respondieron: par --Podemos.

23 - Él les dijo: par --A la verdad, de mi vaso{cf5super [14]} beberéis, y con el bautismo con que yo soy bautizado seréis bautizados; pero el sentaros a mi derecha y a mi izquierda no es mío darlo, sino a aquellos para quienes está preparado por mi Padre.{cf5super [15]}

24 - Cuando los diez oyeron esto, se enojaron contra los dos hermanos.

25 - Entonces Jesús, llamándolos, dijo: par --Sabéis que los gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y los que son grandes ejercen sobre ellas potestad.

26 - Pero entre vosotros no será así, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor,

27 - y el que quiera ser el primero entre vosotros será vuestro siervo;{cf5super [16]}

28 - como el Hijo del hombre, que no vino para ser servido, sino para servir{cf5super [17]} y para dar su vida en rescate{cf5super [18]} por todos.{cf5super [19]}

29 - Al salir ellos de Jericó,{cf5super [20]} lo seguía una gran multitud.

30 - Y dos ciegos{cf5super [21]} que estaban sentados junto al camino, cuando oyeron que Jesús pasaba, clamaron, diciendo: par --¡Señor, Hijo de David,{cf5super [22]} ten misericordia de nosotros!

31 - La gente los reprendía para que callaran, pero ellos clamaban más, diciendo: par --¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de nosotros!

32 - Jesús, deteniéndose, los llamó y les dijo: par --¿Qué queréis que os haga?

33 - Ellos le dijeron: par --Señor, que sean abiertos nuestros ojos.

34 - Entonces Jesús, sintiendo compasión, les tocó los ojos, y en seguida recibieron la vista y lo siguieron.