Mateo 24:40 - La Biblia Reina Valera 1862

Libro de Mateo
Capitulos:

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1 - Y SALIDO Jesús del templo, íbase; y se llegaron sus discípulos, para mostrarle los edificios del templo.

2 - Y respondiendo Jesús, les dijo: ¿No veis todo esto? De cierto os digo, que no será dejada aquí piedra sobre piedra que no sea derribada.

3 - Y sentándose él en el monte de las Olivas, se llegaron a él los discípulos aparte, diciendo: Dínos cuando serán estas cosas, y qué señal habrá de tu venida, y del fin del siglo.

4 - Y respondiendo Jesús, les dijo: Mirád que nadie os engañe.

5 - Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán.

6 - Y oiréis guerras y rumores de guerras: mirád que no os turbéis; porque es menester que todo esto acontezca; mas aun no es el fin.

7 - Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y serán pestilencias, y hambres, y terremotos por los lugares.

8 - Y todas estas cosas, principio de dolores.

9 - Entónces os entregarán para ser afligidos; y os matarán; y seréis aborrecidos de todas naciones, por causa de mi nombre.

10 - Y muchos entónces serán escandalizados; y se entregarán unos a otros; y unos a otros se aborrecerán.

11 - Y muchos falsos profetas se levantarán, y engañarán a muchos.

12 - Y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se resfriará.

13 - Mas el que perseverare hasta el fin, éste será salvo.

14 - Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, por testimonio a todas las naciones, y entónces vendrá el fin.

15 - Por tanto cuando viereis la abominación de asolamiento, que fué dicha por Daniel el profeta, que estará en el lugar santo, el que lee, entienda.

16 - Entónces los que estuvieren en Judea, huyan a los montes;

17 - Y el que sobre la techumbre, no descienda a tomar algo de su casa;

18 - Y el que en el campo, no vuelva atrás a tomar sus ropas.

19 - Mas ¡ay de las preñadas, y de las que crían en aquellos dias!

20 - Orád pues que vuestra huida no sea en invierno, ni en día de sábado.

21 - Porque habrá entónces grande aflicción, cual no fué desde el principio del mundo hasta ahora, ni será.

22 - Y si aquellos dias no fuesen acortados, ninguna carne sería salva; mas por causa de los escogidos, aquellos dias serán acortados.

23 - Entónces si alguien os dijere: He aquí, está el Cristo, o allí; no creais.

24 - Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas; y darán señales grandes y prodigios, de tal manera que engañarán, si es posible, aun a los escogidos.

25 - He aquí, os lo he dicho ántes.

26 - Así que si os dijeren: He aquí, en el desierto está; no salgáis. He aquí, en las cámaras; no creais.

27 - Porque como relámpago que sale del oriente, y se muestra hasta el occidente, así será también la venida del Hijo del hombre.

28 - Porque donde quiera que estuviere el cuerpo muerto, allí se juntarán también las águilas.

29 - Y luego después de la aflicción de aquellos dias, el sol se oscurecerá; y la luna no dará su lumbre; y las estrellas caerán del cielo; y las virtudes de los cielos serán conmovidas.

30 - Y entónces se mostrará la señal del Hijo del hombre en el cielo, y entónces lamentarán todas las tribus de la tierra; y verán al Hijo del hombre que vendrá sobre las nubes del cielo, con poder y grande gloria.

31 - Y enviará sus ángeles con trompeta y gran voz; y juntarán sus escogidos de los cuatro vientos, del un cabo del cielo hasta el otro.

32 - De la higuera aprendéd la comparación: Cuando ya su rama se enternece, y las hojas brotan, sabéis que el verano está cerca.

33 - Así también vosotros, cuando viereis todas estas cosas, sabéd que está cercano, a las puertas.

34 - De cierto os digo, que no pasará esta generación que todas estas cosas no acontezcan.

35 - El cielo y la tierra perecerán, mas mis palabras no perecerán.

36 - Mas del día o hora, nadie lo sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino mi Padre solo.

37 - Mas como los dias de Noé, así será la venida del Hijo del hombre.

38 - Porque como en los dias ántes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, tomando mujeres, y dándolas en matrimonio, hasta el día que Noé entró en el arca,

39 - Y no conocieron hasta que vino el diluvio, y los llevó a todos; así será también la venida del Hijo del hombre.

40 - Entónces estarán dos en el campo; uno será tomado, y otro será dejado:

41 - Dos mujeres moliendo a un molinillo; la una será tomada, y la otra será dejada.

42 - Velád pues, porque no sabéis a que hora ha de venir vuestro Señor.

43 - Esto empero sabéd, que si el padre de familias supiese a cual vela el ladrón había de venir, velaría, y no dejaría minar su casa.

44 - Por tanto también vosotros estád apercibidos; porque el Hijo del hombre ha de venir a la hora que no pensáis.

45 - ¿Quién pues es el siervo fiel y prudente, al cual su Señor puso sobre su familia, para que les dé alimento a tiempo?

46 - Bienaventurado aquel siervo, al cual, cuando su Señor viniere, le hallare haciendo así.

47 - De cierto os digo, que sobre todos sus bienes le pondrá.

48 - Mas si aquel siervo malo dijere en su corazón: Mi señor se tarda de venir;

49 - Y comenzare a herir sus compañeros, y aun a comer y beber con los borrachos:

50 - Vendrá el Señor de aquel siervo el día que él no espera, y a la hora que él no sabe,

51 - Y le apartará, y pondrá su parte con los hipócritas: allí será el lloro, y el crujir de dientes.