Lamentaciones 4:4 - Nueva Versión Internacional (1999)

Libro de Lamentaciones
Capitulos:

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1 - ¡El oro ha perdido su lustre! ¡Se ha empañado el oro fino! ¡Regadas por las esquinas de las calles se han quedado las joyas sagradas!

2 - par{qc Betpar} A los apuestos habitantes de Sión, que antaño valían su peso en oro, hoy se les ve como vasijas de barro, ¡como la obra de un alfarero!

3 - par{qc Guímelpar} Hasta los chacales ofrecen el pecho y dan leche a sus cachorros, pero Jerusalén{cf2super [q]} ya no tiene sentimientos; ¡es como los avestruces del desierto!

4 - par{qc Dáletpar} Tanta es la sed que tienen los niños, que la lengua se les pega al paladar. Piden pan los pequeñuelos, pero nadie se lo da.

5 - par{qc Hepar} Quienes antes comían los más ricos manjares hoy desfallecen de hambre por las calles. Quienes antes se vestían de fina púrpura hoy se revuelcan en la inmundicia.

6 - par{qc Vavpar} Más grande que los pecados de Sodoma es la iniquidad de Jerusalén; ¡fue derribada en un instante, y nadie le tendió la mano!

7 - par{qc Zayinpar} Más radiantes que la nieve eran sus príncipes, y más blancos que la leche; más rosado que el coral era su cuerpo; su apariencia era la del zafiro.

8 - par{qc Jetpar} Pero ahora se ven más sucios que el hollín; en la calle nadie los reconoce. Su piel, reseca como la leña, se les pega a los huesos.

9 - par{qc Tetpar} ¡Dichosos los que mueren por la espada, más que los que mueren de hambre! Torturados por el hambre desfallecen, pues no cuentan con los frutos del campo.

10 - par{qc Yodpar} Con sus manos, mujeres compasivas cocinaron a sus propios hijos, y esos niños fueron su alimento cuando Jerusalén fue destruida.

11 - par{qc Cafpar} El caps Señorcaps0 dio rienda suelta a su enojo; dejó correr el ardor de su ira. Le prendió fuego a Sión y la consumió hasta sus cimientos.

12 - par{qc Lámedpar} No creían los reyes de la tierra, ni tampoco los habitantes del mundo, que los enemigos y adversarios de Jerusalén cruzarían alguna vez sus puertas.

13 - par{qc Mempar} Pero sucedió. Por los pecados de sus profetas. Por las iniquidades de sus sacerdotes. ¡Por derramar sangre inocente en las calles de la ciudad!

14 - par{qc Nunpar} Con las manos manchadas de sangre, andan por las calles como ciegos. No hay nadie que se atreva a tocar siquiera sus vestidos.

15 - par{qc Sámejpar} ¡Largo de aquí, impuros!, les grita la gente. ¡Fuera! ¡Fuera! ¡No nos toquen! Entre las naciones paganas les dicen: Son unos vagabundos, que andan huyendo. No pueden quedarse aquí más tiempo.

16 - par{qc Pepar} El caps Señorcaps0 mismo los ha dispersado; ya no se preocupa por ellos. Ya no hay respeto para los sacerdotes ni compasión para los ancianos.

17 - par{qc Ayinpar} Para colmo, desfallecen nuestros ojos esperando en vano que alguien nos ayude. Desde nuestras torres estamos en espera de una nación que no puede salvarnos.

18 - par{qc Tsadepar} A cada paso nos acechan; no podemos ya andar por las calles. Nuestro fin se acerca, nos ha llegado la hora; ¡nuestros días están contados!

19 - par{qc Qofpar} Nuestros perseguidores resultaron más veloces que las águilas del cielo; nos persiguieron por las montañas, nos acecharon en el desierto.

20 - par{qc Reshpar} También cayó en sus redes el ungido del caps Señorcaps0 , que era nuestra razón de vivir. Era él de quien decíamos: ¡Viviremos bajo su sombra entre las naciones!

21 - par{qc Shinpar} ¡Regocíjate y alégrate, capital de Edom, que vives como reina en la tierra de Uz! ¡Pero ya tendrás que beber de esta copa, y quedarás embriagada y desnuda!

22 - par{qc Tavpar} Tu castigo se ha cumplido, bella Sión; Dios no volverá a desterrarte. Pero a ti, capital de Edom, te castigará por tu maldad y pondrá al descubierto tus pecados.