Jeremias 11:21 - Nueva Reina Valera 1990 (Adventista)

Libro de Jeremias
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1 - Palabra del Eterno a Jeremías:

2 - "Oye las palabras de este pacto, y habla a todo hombre de Judá, y a todo habitante de Jerusalén.

3 - "Les dirás: Así dice el Eterno, Dios de Israel: Maldito el hombre que no obedezca las palabras de este pacto,

4 - "que mandé a vuestros padres cuando los saqué de Egipto, del horno de hierro, y les dije: 'Oíd mi voz y cumplid mis Palabras, conforme a todo lo que os mando, y seréis mi pueblo, y yo seré vuestro Dios;

5 - "'para que confirme el juramento que hice a vuestros padres, que les daría la tierra que mana leche y miel', la tierra que poseéis ahora". Y respondí: "¡Amén, Señor!"

6 - Y el Eterno me dijo: "Pregona todas estas palabras en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén, diciendo: 'Oíd las cláusulas de este pacto, y cumplidlas.

7 - "'Desde que saqué a vuestros padres de Egipto hasta hoy, una y otra vez les advertí: Escuchad mi voz.

8 - "'Pero no oyeron, ni inclinaron su oído, antes siguieron la terquedad de su malvado corazón. Por eso traje sobre ellos todas las maldiciones de este pacto que yo les había mandado, y que no cumplieron'".

9 - Entonces, el Eterno me dijo: "Hay una conspiración entre los hombres de Judá y entre los habitantes de Jerusalén.*

10 - "Se han vuelto a las maldades de sus primeros padres, que no quisieron escuchar mis Palabras, antes se fueron tras otros dioses para servirles. Las casas de Israel y de Judá invalidaron mi pacto, que yo había concertado con sus padres.

11 - "Por tanto, así dice el Eterno: Yo traigo sobre ellos un mal del que no podrán salir. Clamarán a mí, y no los oiré.

12 - "Las ciudades de Judá y los habitantes de Jerusalén irán, y clamarán a los dioses a quienes queman incienso. Pero no los podrán salvar en el tiempo de su calamidad.

13 - "Porque cuantas son tus ciudades tantos fueron tus dioses, oh Judá; y según el número de tus calles, oh Jerusalén, levantaste altares de ignominia, altares para ofrecer incienso a Baal.

14 - "Tú, pues, no ores por este pueblo, ni eleves por ellos clamor ni oración; porque no los oiré el día que en su aflicción clamen a mí.

15 - "¿Qué tiene que hacer mi amada en mi casa, habiendo cometido tantas abominaciones? ¿Crees que los sacrificios y las carnes santificadas podrán evitar el castigo? ¿Puedes gloriarte de eso?"

16 - En otro tiempo el Eterno te llamó olivo verde, de hermoso fruto y parecer. Pero ahora con voz de gran estrépito encenderá fuego sobre él, y quebrarán sus ramas.

17 - Porque el Eterno Todopoderoso, que te plantó, ha pronunciado mal contra ti, a causa de la maldad de las casas de Israel y de Judá, que provocaron su enojo al incensar a Baal.

18 - Conocí la conspiración de ellos contra mí, porque el Señor me la reveló, me mostró lo que estaban tramando.

19 - Como cordero inocente que llevan a degollar, yo no entendía que maquinaban contra mí, diciendo: "Destruyamos al árbol con su fruto, cortémoslo de la tierra de los vivientes, y no haya más memoria de su nombre".

20 - Pero, oh Eterno Todopoderoso, que juzgas con justicia, que conoces la mente y el corazón, vea yo tu venganza de ellos, porque a ti he descubierto mi causa.

21 - "Por tanto, así dice el Eterno acerca de los hombres de Anatot, que buscan tu vida diciendo: 'No profetices en nombre del Eterno, y no morirás a nuestra mano'.

22 - "Así dice el Eterno Todopoderoso: 'Yo los castigaré. Los jóvenes morirán a espada, y sus hijos e hijas morirán de hambre.

23 - "'Y no quedará remanente de ellos, porque yo traeré mal sobre los hombres de Anatot, en el año de su castigo'".