Hechos 19:6 - Nueva Reina Valera 1990 (Adventista)

Libro de Hechos
Capitulos:

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1 - Mientras que Apolo estaba en Corinto, Pablo, después de recorrer las regiones superiores, vino a Efeso. Allí encontró a ciertos discípulos,

2 - y les preguntó: "¿Habéis recibido el Espíritu Santo cuando creísteis?" Ellos contestaron: "Ni siquiera hemos oído que existe el Espíritu Santo".*

3 - Pablo les preguntó: "Entonces, ¿en qué fuisteis bautizados? Ellos dijeron: "En el bautismo de Juan".

4 - Dijo Pablo: "Juan bautizó con bautismo de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyesen en el que había de venir después de él, es decir, en Jesús".*

5 - Al oír esto, fueron bautizados en el Nombre del Señor Jesús.*

6 - Y cuando Pablo les impuso las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo, y hablaban en lenguas, y profetizaban.

7 - Eran en todo unos doce hombres.

8 - Y Pablo fue a la sinagoga, y durante tres meses habló con denuedo, razonando y persuadiendo acerca del reino de Dios.

9 - Pero como algunos se endurecieron, rehusaron creer, y ante la multitud, hablaron mal de aquel Camino, Pablo se apartó de ellos. Separó a los discípulos, y cada día les hablaba en la escuela de Tirano.

10 - Esto duró dos años. Así, todos los que habitaban en Asia, judíos y griegos, pudieron oír la Palabra del Señor Jesús.

11 - Y Dios obraba milagros singulares por medio de Pablo,

12 - de tal manera que aun aplicaban a los enfermos, los pañuelos y lienzos que habían tocado el cuerpo de Pablo, y las enfermedades se curaban, y los malos espíritus salían de ellos.*

13 - Algunos exorcistas judíos ambulantes intentaron invocar el Nombre del Señor Jesús sobre los que tenían malos espíritus. Decían: "Os conjuro por Jesús, el que predica Pablo".

14 - Los que hacían esto eran siete hijos de cierto Esceva, jefe de los sacerdotes.

15 - Pero el mal espíritu replicó: "Conozco a Jesús, y sé quién es Pablo, pero vosotros, ¿quiénes sois?"

16 - Y el hombre en quien estaba el mal espíritu, saltó sobre ellos, y dominándolos, pudo más que ellos, de modo que huyeron de aquella casa sin ropa y heridos.

17 - Y esto fue conocido por todos los habitantes de Efeso, tanto judíos como griegos. Y el temor se apoderó de todos, y magnificaban el Nombre del Señor Jesús.

18 - Y muchos de los que habían creído, venían a confesar y denunciar sus malos hechos.

19 - Muchos de los que habían practicado la magia, trajeron sus libros, y los quemaron ante todos. Y sacando la cuenta de su precio, hallaron que era 50.000 denarios (unos 50. 000 días de trabajo).

20 - Así crecía y se robustecía poderosamente la palabra del Señor.

21 - Después de esto, Pablo decidió ir a Jerusalén, pasando por Macedonia y Acaya. Decía: "Después de estar allá, debo visitar también a Roma".

22 - Y enviando a Macedonia a dos de sus ayudantes, Timoteo y Erasto, él se quedó por algún tiempo en Asia.

23 - Entonces hubo en Efeso un gran alboroto acerca del Camino.

24 - Un platero llamado Demetrio, que labraba en plata templecillos de Diana, daba a los artífices no poca ganancia.

25 - Reunió a éstos y a sus obreros, y les dijo: "Compañeros, vosotros sabéis que de este oficio tenemos buena ganancia.

26 - "Y veis y oís que ese Pablo, no sólo en Efeso, sino en casi toda el Asia, ha persuadido y apartado a mucha gente, diciendo que no son dioses los que se hacen con las manos.

27 - "No sólo hay peligro de que este negocio se desacredite, en perjuicio nuestro, sino también que el templo de la gran diosa Diana sea estimado en nada, y comience a derrumbarse su majestad, a quien toda el Asia y el mundo honra".

28 - Cuando oyeron esto, se llenaron de ira, y gritaban: "¡Grande es Diana de los efesios!"

29 - Y la ciudad se llenó de confusión, y se lanzaron juntos al teatro, arrastrando con ellos a Gayo y a Aristarco, macedonios, compañeros de Pablo.

30 - Pablo quiso salir a presentarse al pueblo, pero los discípulos no lo dejaron.

31 - También algunas autoridades del Asia, que eran sus amigos, enviaron a rogarle que no se presentase en el teatro.

32 - Unos gritaban una cosa, y otros otra; porque la concurrencia estaba confusa, y los más ni sabían por qué se habían juntado.

33 - Y de entre la muchedumbre, los judíos empujaron a Alejandro hacia el frente. Entonces Alejandro pidió silencio con la mano, y quiso hablar al pueblo.

34 - Pero cuando conocieron que era judío, todos a una voz gritaron durante casi dos horas: "¡Grande es Diana de los efesios!"

35 - Entonces, cuando el magistrado los hubo apaciguado, dijo: "Efesios, ¿quién hay de los hombres que no sepa que la ciudad de Efeso es guardiana del templo de la gran diosa Diana y de su imagen caída del cielo?

36 - "Puesto que esto no se puede contradecir, conviene que os apacigüeís, y que nada hagáis precipitadamente.

37 - "Habéis traído a estos hombres, sin ser sacrílegos ni blasfemadores de nuestra diosa.

38 - "Si Demetrio y sus artífices tienen pleito con alguno, se concede audiencia y hay procónsules. Acúsense unos a otros.

39 - "Y si demandáis alguna otra cosa, en legítima asamblea se puede decidir.

40 - "Porque hay peligro de que seamos acusados de sedición por este tumulto de hoy, no habiendo ninguna causa por la cual podamos dar razón de este tumulto".

41 - Dicho esto, despidió a la gente.